La hora del baño es un gran momento para nuestros niños. Les encanta meterse en el agua, y jugar con todo aquello que flota a su alrededor, ya sea un pez o un patito de goma, los botes de champu o de gel, o la misma esponja.
El problema puede venir cuando les lavamos el pelo, cosa que a más de uno no le gusta nada. Y entonces esta hora tan deliciosa puede convertirse en un mar de lloros.
Es por eso que hoy os traemos un juguete para la bañera, que además puede ser de gran ayuda para los papis. Es este simpático patito, de Skip Hop, que se llama Dunck. No solo sirve para que nuestro peque juegue y se entretenga en el baño, sino que además, nos puede servir para aclararle la cabeza sin lloros ni lamentos.
En tres colores, vienen como un pack completo, pero solo es apto para niños mayores de 10 meses. Además, se puede meter en el lavavajillas, y por si os interesa sus diseñadores han sido Eric Pfeiffer and Scot Herbst.
Ahora el placer será mayor al bañarse con Dunck no solo para nuestros peques sinó también para nosotros ¿no os parece?
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